JUNIO 2024
El fútbol mexicano ha dejado de lado el ascenso y descenso, y su regreso parece una posibilidad lejana. La única esperanza de que un club de la Liga Expansión MX juegue en la Liga MX es a través de una cuantiosa cantidad de dinero.
La pandemia de COVID-19 pausó el fútbol mexicano durante meses, tiempo suficiente para que los dueños tomaran la polémica decisión de eliminar el ascenso y descenso. Desde 2020, la Liga MX no otorga tal premio ni castigo, y la Liga Expansión MX ha perdido atractivo, con equipos que compiten sin éxito alguno.
La Liga MX ha argumentado la falta de calidad en los estadios de la Liga Expansión MX y ha puesto diversas justificaciones para evitar el tema del ascenso y descenso. La única forma en que los equipos de la Liga Expansión MX pueden acceder a la Primera División es comprando una franquicia o pagando por su lugar.
De acuerdo con el comunicador Fernando Cevallos, los equipos de la Liga Expansión MX podrán “comprar una franquicia o su lugar en la Liga MX”. Esta medida podría ser notificada tras la Asamblea de Dueños que se celebrará este verano, de cara a un nuevo año futbolístico.
Desde el verano de 2020, cuando se anunció la desaparición del ascenso y descenso en la Liga MX, la categoría de plata se convirtió en la Liga Expansión MX, que no ofrece más que un incentivo económico. Cuatro equipos han sido campeones de campeones sin la posibilidad de jugar en la Liga MX: Tampico Madero (2020-21), Atlante (2021-22), Tapatío (2022-23) y Cancún FC (2023-24).
En la próxima temporada de la Liga Expansión MX (2024-25), el campeón de campeones no tendrá importancia en términos de ascenso. Será el equipo que ponga más dinero sobre la mesa el que se convertirá en el nuevo integrante de la Liga MX.
La medida de permitir la entrada a la Liga MX mediante la compra de lugares ha generado críticas y controversias entre los aficionados y expertos del fútbol, quienes ven con preocupación la pérdida de méritos deportivos como base para competir en la máxima categoría del fútbol mexicano.